sábado, 26 de mayo de 2018

La cabaña del tío Tom, Jonathan Plaza Paredes.

Paseando por el bosque de mi pueblo una tarde, me tope con esta pequeña cabaña llamada tronky. ¡vaya!, exclamé, si se parece a la cabaña del tío Tom!!. Me recuerda, a una de esas chozas del la época prehistórica, donde los hombres mono, las brujas o meigas, seres de fantasía, duendes, se guarecían del invierno, y dormían plácidamente hasta la mañana siguiente, elaboraban sus pócimas etc; de seguro, que ahora, la utilizan con otros fines, como por ejemplo, yo que sé...., para fumar marihuana, entre otras muchas cosas, y ahí lo dejo.
Está muy bien lograda, lo que me hace pensar, que si se hicieran unas cuantas más como esa, ¡se podría montar hasta una aldea de enanos o de pigmeos!; esto es lo que sucede, cuando uno se adentra en el océano inexpugnable de los bosques, entre animales de todo tipo, y alimañas variadas para elegir.
Lamentándolo mucho, he de decir, que las montañas de nuestro pueblo, en Viladecans, y sus bosques, los cuales tendrían que ser más protegidos, están siendo desforestados al cien por cien; hace un tiempo, hice un vídeo mostrando las imágenes tan terribles que se estaban dando, incluso, los vecinos de la zona, de la urbanización, van con sus hijos en temporada de frío, y cortan leña de los árboles secos y podridos, cuando eso debería estar prohibido, a menos, que se tenga una licencia especial, que indique, que puede hacer leña del árbol caído......
Hace unos años, tuve también que informar al seprona, servicio forestal de la guardia civil, porque estaba el bosque que daba pena; luego, claro, como es normal, se quejan de que haya incendios, ¡es que no me extraña!, si tenemos un servicio forestal, que se pasa por el forro lo que ocurre en el campo, así también trabajo yo, haciendo caso omiso de las informaciones, y dejando la basura humana que se acumule por todos lados.
En cierto momento de mi vida, decidí y fui yo hacer limpieza, me compré unos guantes, un buen manojo de bolsas de basura, y empecé a recoger los escombros por mi mismo, a un arriesgo de que me pillaran los mossos, o la policía; a lo que me pregunto, ¿no sería mejor, hacer patrullas ciudadanas que se vayan turnando, y limpiar un poco las zonas verdes, repoblar sitios desforestados, y poner carteles para concienciar a la población?.
Pero claro, se me olvidaba, que la gente no trabaja de gratis, y sinceramente, les da igual si se prende fuego, como si desaparece como por arte de magia; las cosas desgraciadamente son así, pero estaría bonito, que de muy de vez en cuando, se hiciera al menos el esfuerzo, de lograr esas pequeñas grandes proezas, por el bien del planeta y de su naturaleza, que a fin de cuentas, es también la nuestra, ¿no os parece?.

Jonathan Plaza Paredes

1 comentario:

Can Palmer dijo...

Mucho en que pensar nos dejas con tu relato!!
Bien venido de nuevo Jonathan!!!